Súper mamá: cómo lidiar con el estrés de las mamás primerizas
La maternidad es una experiencia muy gratificante. Creaste un ser tan hermoso. Todo en ellos es perfecto. Pero puede dar miedo. Especialmente para madres primerizas. Es posible que se haya preguntado: "¿Qué pasa si lo hago mal?"
Algunos dicen que si empiezas a preocuparte entonces estás cargando. Aquí hay algunos consejos que debe considerar para ayudarla después de dar a luz a un niño de alegría por primera vez.
No tengas miedo de tener algo de tiempo para mí
Es natural poner a su bebé en primer lugar, como debe hacerlo. Pero eso no significa que haya algo malo en cuidarse a uno mismo también. No te descuides.
Si no tienes ayudantes en casa que te releven de las tareas de mamá, aprovecha al máximo la siesta de tu bebé. Sí, es ideal cuidar a tu precioso bebé incluso si está dormido, pero debes aprovechar esa oportunidad para tener tu propio tiempo para ti. A la larga, te lo agradecerás.
Esforzarse demasiado y con demasiada frecuencia puede provocar agotamiento. Tenga una película a mano para ver, haga algo de ejercicio, tome un baño satisfactorio, hágase una manicura o pedicura o tome una siesta también. Sea lo que sea que te permita respirar y relajarte, hazlo mientras el angelito duerme.
Cuide su espalda baja
Los ligamentos de la espalda baja se estiran durante el embarazo, sin mencionar que los músculos se estiran hacia adelante a medida que el niño crece por dentro. Después de dar a luz, tu espalda normalmente podría beneficiarse de un poco de cariño. Adopte ejercicios de los que su espalda baja podría beneficiarse.
Ayudar a que tu espalda esté en plena forma te ayudará a sentirte mejor, aumentará tu confianza y te ayudará a ser la mejor mamá posible.
No tenga miedo de pedir ayuda
Si hay ayuda disponible, no tema pedirla. Tal vez tengas un amigo, un vecino de confianza o un familiar que esté dispuesto a ayudarte a cuidar a tu bebé. Aprovéchate de ello.
No te prives de las cosas que solías hacer antes de darle la bienvenida a tu bebé al mundo. Permita que sus contactos de confianza cuiden a su hijo durante unas horas para que usted pueda descansar o relajarse con algunos amigos o tener una cita con su esposo.
Estas actividades podrían ayudarle a realinearse y tener una mente sana. Tu bebé sabe cuando estás estresada. Relajarse cuando se puede crea un bucle infinito de mamá feliz y bebé feliz.
Haga un poco de planificación
Establezca metas para obtener pequeñas recompensas de cada día. Escribe tus planes o rutinas para el día o la semana. Planifica algunas comidas, una rutina de ejercicios, trabajo, recados, actividades familiares, etc. Equilibra tu tiempo entre la maternidad y el bienestar personal.
Mientras planifica su rutina, no olvide también un horario para su pequeño. A los bebés les encanta la rutina. Diseñe estrategias para la hora perfecta de la siesta, el baño y la alimentación.
Como madre, es normal estresarse de vez en cuando. Eres mamá. Eres el centro del universo de alguien. Comprende que el estrés es normal y no permitas que te abrume. Equilibra tu vida en armonía con la de tu hijo. Equilibrar el "tiempo para mí" con la maternidad conducirá a una vida sana y feliz tanto para usted como para su familia.
Felicidades por ser mamá. ¡Tú Molas!